Pedro Sánchez realiza cambios en el Ejecutivo para mejorar la economía del país
Hace escasas horas el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, daba a conocer los cambios que se producirán en su Ejecutivo. Unos cambios que no afectan a la estructura ministerial del Gobierno, pero que reducen las vicepresidencias a tres, y que, todo sea dicho de paso, afectan a algunos de los que se consideraban más cercanos y fieles al presidente.
Y es que, en lo que llevamos de gobierno de coalición, no pocos de los que forman parte del Ejecutivo han protagonizado o se han visto inmersos en episodios que, según las encuestas, y pensando siempre en las próximas elecciones, han hecho perder puntos a Pedro Sánchez en favor de su más ferviente opositor, Pablo Casado.
Esto explica que la remodelación afecte única y exclusivamente a personas que pertenecen al mismo partido político que Pedro Sánchez y no a los del otro partido político del gobierno de coalición.
Por tanto, el fin último de los cambios no sería otro que ganar las próximas elecciones, si bien es cierto que, con dichos cambios, Sánchez pretende dar un vuelco a la economía del país, para que la recuperación económica sea un hecho.
La gestión de la pandemia, la ley de educación y los indultos, por mencionar solo algunos, han contribuido al cambio de un Gobierno que no hace mucho presentaba orgulloso sus Fundamentos y propuestas para una Estrategia Nacional de Largo Plazo, es decir, España 2050, en el que se detallan los desafíos de futuro, entre los que se encuentran alcanzar la vanguardia educativa, mejorar la producción, reducir la contaminación, mejorar la sostenibilidad, o reducir la pobreza y las desigualdades, por mencionar solo algunos.
No obstante, cualquiera que haya ojeado la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, sabrá que el documento presentado por Pedro Sánchez está en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030. Por desgracia, habrá que esperar mucho para poder comprobar cuanto de lo incluido en España 2050 se ha cumplido.
En cualquier caso, lo cierto es España habrá de esforzarse mucho para ponerse a la altura de algunos de sus vecinos europeos en asuntos como, por ejemplo, la movilidad sostenible, algo que, más que del gobierno, depende de la sociedad, una sociedad que, sin duda, está cada vez más concienciada, por lo que, es posible, que los logros de cara a 2050 tengan poco que ver con el Gobierno y mucho que ver con la conciencia social.
