El Gobierno destinará 55 millones a la construcción de la Biblioteca Pública del Estado en Barcelona

Iceta cree que el edificio debería tener un «nombre propio y no uno genérico»

MADRID, 02 (SERVIMEDIA)

El Ministerio de Cultura y Deporte destinará un total de 55 millones de euros a la construcción de la Biblioteca Pública del Estado en Barcelona, una instalación que se erigirá en un terreno de la Estación de Francia de la Ciudad Condal, cuyas obras comenzarán en 2023 y está previsto que concluyan en 2027.

Así se puso de manifiesto este viernes en el acto de presentación del proyecto en el que estuvieron presentes el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta; la consejera de Cultura de la Generalitat de Cataluña, Natàlia Garriga; el teniente de Alcaldía de Cultura, Educación, Ciencia y Comunidad en el Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Martí, y el arquitecto del proyecto, Josep María Miró i Gellida.

Para la construcción de la biblioteca, Cultura destinará 55 millones de euros, de los que 1.129.542 procedentes de los Presupuestos Generales del Estado de 2022 se dedicarán a los trabajos previos de demolición de la estructura que ocupa actualmente el terreno que ocupará la instalación, y otros 283.888 euros se invertirán en la actualización del proyecto existente para su adaptación a las nuevas necesidades de la biblioteca y a las nuevas normas en materia energética y tecnológica, y en su ajuste a los precios de mercado actuales.

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Se trata de la biblioteca pública estatal con mayor inversión y con mayores dimensiones de las construidas hasta la fecha. Se ubicará en un solar de más de 16.000 metros cuadrados cedido en 2004 por el Ayuntamiento de Barcelona, y tendrá una capacidad para albergar alrededor de 600.000 volúmenes.

Una vez finalizada la obra de demolición y aprobada la actualización del proyecto se solicitará al Ayuntamiento de Barcelona la licencia de obra y se formalizará el contrato de ejecución de la obra, cuya previsión es que comience a finales de 2023 y concluya en 2027, según el calendario aprobado el pasado mes de diciembre por la Comisión de Seguimiento, de la que forman parte Cultura, la Generalitat de Cataluña y el propio consistorio barcelonés.

En declaraciones a los periodistas, Iceta celebró que por fin se vaya a acabar con la anomalía de que la Ciudad Condal cuente con una Biblioteca Pública del Estado, algo que en 1989 el entonces ministro de Cultura, Jorge Semprún, consideró necesario. «(Esto) es una buena noticia para Barcelona y para los amantes de la literatura y de las letras», refrendó.

En cuanto a la denominación del espacio, señaló su voluntad de alcanzar un acuerdo con la Generalitat y el Ayuntamiento, pero dejó claro su aspiración a que cuente con un «nombre propio» que «honre a personas que se han distinguido por su labor en favor de la cultura, la lengua y la literatura». Tras reiterar su aspiración a que la nomenclatura surja del consenso entre las tres administraciones implicadas, insistió en que «me gustaría que fuera un nombre propio y no uno genérico».

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SERVICIOS

En la parte destinada al público, la biblioteca contará con salas de lectura, salas de información, sala de acceso al fondo general y especializado, fondo infantil y juvenil, sala de prensa diaria, salón de actos, salas multifuncionales, puntos de acceso a Internet, máquinas de autopréstamo, zona de descanso, zonas de exposiciones, cafetería-librería, auditorio y zona de aparcamiento.

En las zonas de acceso restringido, habrá áreas de trabajo y de depósitos especializados para la conservación de las obras ingresadas por depósito legal correspondientes a las obras editadas en la provincia de Barcelona.

La Comisión de Seguimiento del proyecto retomó la actividad en septiembre de 2021, tras siete años sin reunirse. Su desarrollo en su emplazamiento definitivo se redactó en 2010, después de que se desistiera de construirlo en el mercado del Born.