El 20% de las anafilaxias pueden desencadenarse en el ámbito escolar

MADRID, 18 (SERVIMEDIA)

La la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (Seicap) advirtió este jueves de que la anafilaxia es la reacción más grave que puede producirse en un niño con alergia y hasta un 20% de las anafilaxias pueden desencadenarse en el ámbito escolar.

«Es esencial que el personal de la escuela esté capacitado para reconocer y responder a las reacciones alérgicas. Para ello, debe conocer la normativa y saber actuar ante un caso de anafilaxia. Es muy importante el reconocimiento precoz y la administración de la adrenalina que viene en un autoinyector», advirtió la doctora Mercedes Escarrer, presidenta del XLVII Congreso de la Seicap y coordinadora del taller de alergia alimentaria para personal de cocina y comedor de centros educativos impulsado por la Seicap junto a la Sociedad de Neumología Pediátrica (SENP) y la Asociación Española de Personas con Alergia a Alimentos y Látex (Aepnaa) que tendrá lugar en el marco de su congreso anual este viernes.

Los comedores escolares, debido a la variedad de alimentos que manipulan y sirven, son lugares donde los niños pueden correr un riesgo particularmente alto de exposición a alérgenos. En particular, la contaminación cruzada por utensilios de cocina es un peligro muy común, según advierte la Sociedad de Inmunología.

«Entre el personal de cocina y comedor de centros educativos existen carencias sobre cómo reconocer los alérgenos ocultos en los alimentos y también en torno a cómo identificar una reacción alérgica grave, como es la anafilaxia y tratarla», agregó Escarrer.

Quizás también te interese:  El Museo Sorolla homenajeará el jueves al pintor valenciano coincidiendo con el día del centenario de su muerte

En España, según datos de la SEICAP, unos 100.000 niños que asisten a comedores escolares tienen alergia alimentaria. La contaminación cruzada ocurre cuando un alimento entra en contacto con otro alimento, superficie o utensilio que está contaminado con alérgenos o patógenos, lo que puede dar lugar a reacciones alérgicas o enfermedades transmitidas por los alimentos. En el caso de los comedores escolares, donde se atiende a un gran número de niños con diferentes necesidades dietéticas y posibles alergias, es fundamental tomar medidas adecuadas para prevenir esta contaminación, sostienen en la Seicap.

Según los expertos, la no identificación por parte del personal de cocina de un alérgeno oculto por errores de etiquetado, el uso del mismo aceite o la misma plancha para freír distintos alimentos, la proximidad o contacto de un alimento con otro o la manipulación manual sin la debida higiene son errores que pueden derivar en contaminación cruzada y en un riesgo para la salud de los niños alérgicos.